De vertidos, gamberradas y generación espontánea

A veces leer los periódicos de los últimos 4 días de una sentada te provoca sensaciones extrañas. En primer lugar aparece un vertido en el río Barbaña, ese que en un mes, por obra y gracia del concejal de medio ambiente, pasó de cloaca a patrimonio natural , tras el hallazgo el concejal proclama la movilización de su caballería pesada: "El Concello de Ourense movilizó ayer a sus técnicos y personal vinculado al departamento de Medio Ambiente, que dirige el socialista Demetrio Espinosa, para investigar el origen de un vertido detectado en la mañana en el río Barbaña. Según el Concello ourensano se procedió a abrir un expediente tras comprobarse a aparición de escumas no río Barbaña en varios puntos, algún deles ao seu paso pola cidade".

De ahí surgieron las primeras pistas oficiales, normal si tenemos en cuenta que se movilizó tanto a los técnicos como al personal vinculado, ese al que sólo se le llama si las cosas se ponen duras, todo conducía a que podría ser una gamberrada, como la de los 55000 litros de combustible: Fuentes de la Concejalía de Medio Ambiente atribuyeron en un principio el vertido a una posible gamberrada. No obstante, tras detectar que el origen podía proceder de alguna empresa de San Cibrao, decidieron iniciar el expediente sancionador. Elemental querido Watson.



De ahí pasamos a la búsqueda de un culpable industrial (érache moita escuma para ser duns rapases), esto se pone "pofesional". Las investigaciones pueden durar lo que duren, o más.





Y entonces llegan los refuerzos, la Confederación (se escuchan al fondo campanas de solemnidad), e introduce una nueva vía en la investigación, la vía de las cañas, es decir, ¿por qué no nos dejamos de tanto humo que me levanta dolor de cabeza y nos tomamos unas cañas?. Meu dito meu feito, nueva hipótesis del día 24, no hubo vertido al Barbaña, todos tranquilos y nos vamos para casa. Caso cerrado Mike.



Aparece de nuevo el vertido, de nuevo los gamberros, las naves de San Cibrao, la nada otra vez, y vuelta empezar. Houston, Houston, ¿me recibes? creo que tenemos...




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